Teodoro Ruiz Monge. San Vicente

El enovitivinicultor polifacético

Privilegiado por contar con viñedo propio, a este ‘tres en uno’, como mínimo, le mueve la inquietud. Seis proyectos en seis años.

José Luis Ruiz Bañares, en los depósitos que tiene en su casa.

José Luis Ruiz Bañares, Itu para los amigos, abre la puerta de su casa en San Vicente de la Sonsierra. En la fachada reza un cartel. ‘Se vende vino’. Al abrir la puerta no hay portal, sino lagos para pisar, una prensa recogida, depósitos, botellas, cajas,... Lo básico en una bodega de pueblo.

Seguro que Isabel, su madre, le ha dicho infinidad de veces que se esté quieto. «Mi madre ha hecho todas las labores en el viñedo...», dice con admiración con una botella de Isabel Bañares, un vino que Itu le hizo como homenaje. Subir, bajar, coche, viñedo, cepas, la Cueva La Primicia (una maravilla de calado restaurado bajo el castillo), la terraza sobre su tejado, las vistas... Y todo en un abrir y cerrar de ojos. José Luis tomó las riendas hace seis años de la bodega de su padre, Teodoro. «Cuando empecé, mis vinos eran todos jóvenes; ahora hay más propuestas. Cada año, un proyecto nuevo. El penúltimo, el enoturismo. Ahora, la exportación», dice.

La Pacha 2020

Precio 16 euros

Un vino como los de hace muchos años. Seis variedades, viñedo prefiloxérico, maceración carbónica y maloláctica en barrica de roble francés
La  Pacha 2020

Viticultor en la viña; vinicultor en la bodega y guía en el enoturismo. Polifacético. De sus viñas nacen 40.000 botellas. «Soy un privilegiado por tener viñedo propio que es imposible de comprar para una economía modesta. Y el viñedo lo es todo porque cada vino va ligado a él. Por eso, si no vienes de cuna todo es más complicado», dice.

José Luis Ruiz Bañares
José Luis Ruiz Bañares.

Ama la maceración carbónica, la fruta. También sus vinos criados tienen su origen en la fermentación intracelular. «Mi padre trabajó el vino joven. Yo busco algo diferente. Desde la tradición, pero vinos más estructurados, con una viticultura tradicional y sostenible. Intento ser honesto. Cuido la viña como me cuido yo», asevera convencido, además, de que contribuye a cambiar el concepto de Rioja. «Tiene que haber una diferenciación, pero la da la tierra y la climatología, no una etiqueta», concluye.