BODEGAS OLARRA. LOGROÑO

El espíritu clásico de los años 70

La tradición bebe de la época dorada de los vinos de Rioja

BODEGAS OLARRA
Javier Martínez de Salinas, enólogo en Bodegas Olarra.

Bodegas Olarra lleva casi 50 años manteniendo una misma pasión: «Elaborar grandes vinos siguiendo las tradiciones que han llevado a escribir la historia del vino de Rioja».

Por esta razón, explica su enólogo, Javier Martínez de Salinas, este año rinden homenaje a su origen con el relanzamiento de la marca Olarra. «Para el Olarra Gran Reserva 2011, hemos recuperado los procedimientos de elaboración de los años 70, época dorada de los vinos de esta tierra», destaca.

OLARRA GRAN RESERVA 2011

Precio 30 euros

Variedad Tempranillo, Mazuelo y Garnacha
BODEGAS OLARRA

Aquí, «la piedra maestra es el viñedo». El criterio de Olarra sigue la línea tradicional, aunque sin cerrarse a «una actualización de los vinos finos de Rioja, los que nos dieron la fama en todo el mundo».

Clasicismo

El espíritu siempre ha sido clásico, por mucho que haya que adaptarse y satisfacer nuevas demandas. «Hacemos lo que se hacía hace 50 años, pero con más conocimientos y medios», recuerda Martínez de Salinas. En este sentido, los gran reserva y los reserva son los vinos que mejor materializan esa identidad.

«Apostamos por viñedos viejos y de años especialmente buenos», prosigue. Y también es determinante «una buena gestión de las barricas, de las maderas», incluyendo reposiciones continuas. El resultado son vinos «con equilibrio y armonía entre la finura y la estructura», donde no es fácil distinguir la fruta de la madera.

«El máximo de calidad de Rioja está en el contexto de estos vinos de siempre», opina al ser preguntado por el potencial de otras tendencias. «Aquí, nos une la singularidad del valle (con sus particulares como son la humedad, el clima, la pluviometría, etc.) y el resultado óptimo es este tipo de elaboración tradicional», zanja.