LECEA. SAN ASENSIO

Un vino del corazón

Luis Alberto Lecea recupera con la Fiesta del Pisado una tradición ancestral, casi desaparecida en San Asensio

LECEA
Luis Alberto Lecea, con su hija Estela, en los viejos calados.

Un vino del corazón. Del lago, donde se elabora, pero que también sale del corazón del viticultor y bodeguero Luis Alberto Lecea (San Asensio), quien recuperó hace ya once años con la Fiesta del Pisado de la uva una tradición casi perdida en su pueblo y en buena parte de Rioja:«Queríamos revivir cómo hacíamos el vino cuando éramos jóvenes, con mi padre y abuelos», recuerda. «Inicialmente, el objetivo era recuperar esa idea romántica, recordar el trabajo que supone la elaboración artesanal y luego nació nuestro vino, que ya es una de las señas de identidad de la bodega».

Corazón del Lago es un vino de maceración carbónica que todos los años elaboran Lecea y su familia en 'directo' en la fiesta del pisado, exclusivamente con el vino del corazón (repiso): «Es el de más calidad de la maceración carbónica, muy aromático y frutal, con una acidez más bien baja y alto grado alcohólico», explica el viticultor.

CORAZÓN DE LAGO

Precio 9 euros

Variedad tempranillo 100% hecho con el vino corazón.
LECEA

«Es un vino de un rendimiento muy bajo, la mitad que para uno convencional, muy agradable de beber que gusta mucho a quienes conocen estas elaboraciones, pero también a la gente joven que aprecia la carga frutal y tiene cierto 'rechazo' a algunos vinos en los que domina la madera».

El Corazón de Lago no es un vino 'inmediato', como otros maceración carbónica. Lecea lo saca al mercado entre febrero y marzo tras meses de estabilización en hormigón:«No es un beujolais ligerito, sino más consistente que aguanta perfectamente un año completo o mas... Hay gente que me ha llamado para felicitarme después de consumirlo incluso años después». Lecea no trabaja con unos viñedos predestinados a la maceración carbónica desde el cultivo:«No son necesariamente las mejores uvas ni las de una viña en concreto, lo que necesitamos es que sean las uvas más sanas, que estén duras y que no se rompan antes de echarlas al lago». «Para mí –continúa–, este tipo de vinos se caracterizan más por el tipo de fermentación que por el propio viñedo». En cuanto al futuro, Lecea sí cree que la maceración carbónica perdurará:«Estamos hablando de un método que nunca será para grandes producciones, pero sí creo que despierta más interés porque ofrece vinos distintos y con personalidad».